Profecía de la auto-derrota

Profecía de la auto-derrota

Marco Fonseca

El 9 de noviembre de 1830, desde Barranquilla, Simón Bolívar (quien moriría el 17 de diciembre), respondió a una carta del general Juan José Flores, quien en ese momento era presidente de Ecuador. Muy diferente a su famosa Carta de Jamaica, del 6 de septiembre de 1815, en donde el Libertador celebra la ruptura irrevocable de los lazos coloniales entre América Latina y España,  en su carta a Flores el Libertador hizo las siguientes predicciones oscuras y deprimentes para Latinoamérica. He agregado unas líneas con pensamientos propios:

1º) «La América es ingobernable para nosotros.»

«Nosostros», los/as de abajo, pues los/as de arriba hacen su propia gobernabilidad.

2°) «El que sirve una revolución ara en el mar.»

¿Acaso no es esto cierto en Guatemala de los 60s a los 80s? El legado no fue solo el genocidio, las desapariciones, la represión, la destrucción del movimiento revolucionario y popular y el trauma personal, social y político de todo esto. El legado también consiste en la ABSOLUTA DESINTEGRACION (reflejado, también, en el surgimiento de la sociedad civil buena y permitida desde donde trabaja la hegemonía) y en la ABSOLUTA IMPOSIBILIDAD (psicológica, ideológica y política desde donde trabaja el colonialismo, la sujeción, la alienación) de abrir surcos de articulación entre los/as pobres, los/as de abajo, los/as indígenas y campesinos/as… quienes constantemente se ven presas de lo hegemónico, la desactivación, la división, la sospecha, la competencia, la cooptación, el protagonismo, la paralización. Es más fácil que la gente se siente a hablar con enemigos -aunque se disfracen de amigos/as- a que se junten todos/as, en un ranchito de cualquier comunidad, a curar sus diferencias personales. Pues ahorita ya no es el legado de la revolución fallida lo que divide. Son las personalidades y los liderazgos y el trabajo de la hegemonía por medio de los mismos.

3º) «La única cosa que se puede hacer en América es emigrar.»

Sino, pregúntenle a todos/as los/as connacionales que buscan migrar pal Norte.

4º) «Este país caerá infaliblemente en manos de la multitud desenfrenada, para después pasar a tiranuelos casi imperceptibles, de todos los colores y razas.»

Es exactamente como funciona la hegemonía: se construye un consenso dominante en el cual participa «la multitud desenfrenada» y, luego del voto, se procede a la traición. Pasa en toda elección. Pasa siempre. Y la «multitud» ve sus condiciones empeorar hasta que llega otro/a idiota a prometer – «desde afuera», desde «la semilla», desde el «ideario liberal» – cambios que no cambian nada. ¿Acaso el gobierno de la restauración conservadora y neoliberal, un gobierno de «tiranuelos casi imperceptibles, de todos los colores y razas», no ilustra esto perfectamente? ¿Acaso las promesas restauradoras, las simillitas del pnudismo y los idearios intergeneracionales no representan, en esencia, trinquetes y espejitos neocolonialistas? No importa de qué fracción de las elites dominantes vengan los «tiranuelos», el resultado es más de lo mismo pero siempre peor.

5º) «Devorados por todos los crímenes y extinguidos por la ferocidad, los europeos no se dignarán conquistarnos.»

Después de la extracción neoliberal y globalizadora, cambio climático y devastación natural, no queda nada más que conquistar. Y con ello se acaba también ese mito romántico de que «Guatemala es rica en recursos naturales», pues los mismos están ya casi agotados.

6º) «Si fuera posible que una parte del mundo volviera al caos primitivo, éste sería el último período de la América.»

Digan lo que digan, no importa quien lo diga, buscar hacer la Refundación sin articulación entre los/as de abajo, es arar el mar.

Sin Refundación articulada, por ahí va Guatemala.

 

Vamos Guatemala hacia la #RefundaciónYa desde abajo, democrática y rupturista

Marco Fonseca es Doctor en Filosofía Política y Estudios Latinoamericanos por parte de la York University. Actualmente es instructor en el Departamento de Estudios Internacionales de Glendon College, York University. Su libro más reciente se titula «Gramsci’s Critique of Civil Society. Towards a New Concept of Hegemony» (https://goo.gl/Oeh4dG).

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